Con este triunfo se ubicó a cinco de los líderes, vuelve a meterse en la conversación del Campeonato y, lo más importante, le devolvió la confianza a la gente que ya empieza a ilusionarse.
De arranque nomás, Boca quiso adueñarse del protagonismo del partido y lo logró ante un Colón que, diezmado por algunas ausencias importantes, intentó hacer su negocio en La Bombonera.
Sin embargo, lentamente Boca empieza a demostrar que el esquema va engranando. Manejó gran parte del partido la pelota, la distribuyó bien y fue bastante claro a la hora de generar fútbol.
Nuevamente se vio a un Viatri muy dinámico y metido en el partido, un Chávez que se lo vio más suelto a la hora de demostrar sus habilidades, un Clemente que recuperó la imagen de ese jugador que todos conocímos con velocidad y llegada y un Sebastián Battaglia al que ya no alcanzan los adjetivos para calificar el trabajo que realiza como equilibrista del equipo.
A los 3 minutos, el primero en avisar fue Lucas Viatri quien remató cerca del palo de Pozo, tras recibir un gran pase de Chávez al punto penal.
Cuatro minutos más tarde, el enganche se perdió un mano a mano contra el arquero y, a los 22 minutos, el mismo Pochi le metió a Clemente una pelota larga en profundidad que el defensor se encargó de rematar cerca del palo del arquero.
Boca siguió manejando el encuentro y Colón no le encontraba la manija al partido. El equipo de Borghi siguió insistiendo y, a los 27 minutos, Matías Caruzzo se lo perdió con un cabezazo que contuvo el arquero visitante.
A sólo 5 del final de la primera etapa, Gary Medel cerró mal una pelota y un oportuno Moreno y Fabianessi punteó el balón derrotando la línea de gol de Cristian Lucchetti. El equipo de Mohamed, sin buscarlo y sin merecerlo, se ponía en ventaja por 1-0.
Cuando la gente todavía se fastidiaba por lo injusto que sonaba el resultado debido al desarrollo del partido, un solitario Matías Caruzzo apareció sorpresivamente en el borde del área y abrió la pelota hacia la derecha para la entrada de Palermo. El goleador, mano a mano contra Pozo, definió de manera fenomenal por arriba del arquero empatando el resultado 1-1, a segundos del final.
Para el complemento, Boca salió con la misma actitud y juego que en el primer tiempo.
A los 4 minutos, Clemente lanzó un centro desde la derecha al segundo palo, mal cierre del defensor Sabalero y Palermo, quien mató el esférico con el pecho, nuevamente hizo explotar La Bombonera, definiendo de derecha ante un vencido Marcos Díaz que, dos minutos antes, ingresó en reemplazo del lesionado Diego Pozo.
Colón intentó adelantarse unos metros en el campo de juego pero no le alcanzó para incomodar al local. En cambio, con el resultado a favor, los de Borghi pararon un poco el ritmo sin perder la superioridad ante un Colón que nunca demostró tener ideas.
A los 15 minutos, un disparo de fuera del área del Pochi Chávez testeó a Marcos Díaz y, a los 25, Lucas Viatri se encontró mano a mano con el arquero, lo eludió, terminó derribado por Díaz y penal para Boca que Palermo se encargó de desviarlo por arriba del travesaño.
Boca se perdía la oportunidad de sacar una ventaja de dos goles y liquidar el partido.
A 15 del final, Quiroga cometió una falta inocente sobre Clemente Rodríguez y salió expulsado por doble amonestación, logrando que el Sabalero se termine de desmoronar a todo nivel.
Ya con Jesús Méndez en cancha, Boca manejó muy bien la pelota y, hasta por momentos, bailó a Colón.
A 10 del final, Sebastián Battaglia probó desde afuera del área y Díaz contuvo el remate.
Sin embargo, lo mejor estaba por venir. A los 40 minutos, centro de Clemente al segundo palo, la baja Viatri que dejó sólo a Palermo mano a mano con Díaz y el eterno, interminable e intratable goleador, decretó el 3-1 final con sabor a fiesta en La Bombonera.
Festejo importante en casa. Boca volvió a ganar, a golear y, esta vez, a gustar.
El Xeneize, además de su segundo triunfo consecutivo y quedar a sólo cinco puntos de los líderes, consiguió devolverle a la gente la ilusión y la esperanza de prenderse nuevamente en el Campeonato.
FICHA DEL PARTIDO:
BOCA JUNIORS: 3
29. Cristian Lucchetti; 8. Gary Medel, 6. Matías Caruzzo, 13. Juan Manuel Insaurralde; 3. Clemente Rodríguez, 22. Cristian Erbes, 5. Sebastián Battaglia, 23. Damián Escudero; 21. Cristian Chávez; 27. Lucas Viatri, 9. Martín Palermo.
D.T.: Claudio Borghi.
SUPLENTES:
Javier García, Leandro Marín, Marcelo Cañete, Matías Giménez, Jesús Méndez, Orlando Gaona Lugo, Pablo Mouche.
COLON: 1
1. Diego Pozo; 5. Ariel Garcé, 3. Salustiano Candía, 6. Ronald Raldes; 8. Mauro Bellone, 7. Federico Higuaín, 16. Iván Moreno y Fabianesi, 4. Ismael Quilez, 19. Juan Luis Quiroga; 18. Facundo Curuchet, 9. Joaquín Larrivey.
D.T.: Antonio Mohamed.
SUPLENTES:
Marcos Díaz, Maximiliano Caire, Marcelo Goux, Ricardo Gómez, Cristian Ledesma, Lucas Mugni, Alfredo Ramírez.
GOLES:
41' PT: Iván Moreno y Fabianesi (Col).
45' PT: Martín Palermo (Boc).
4' ST: Martín Palermo (Boc).
39' ST: Martín Palermo (Boc).
CAMBIOS:
2' ST: Marcos Díaz x Diego Pozo (Col).
12' ST: Lucas Mugni x Salustiano Candía (Col).
33' ST: Ricardo Gómez x Facundo Curuchet (Col).
33' ST: Jesús Méndez x Cristian Chávez (Boc).
42' ST: Pablo Mouche x Lucas Viatri (Boc).
AMONESTADOS:
12' PT: Juan Luis Quiroga (Col).
29' PT: Martín Palermo (Boc).
35' PT: Facundo Curuchet (Col).
19' ST: Ronald Raldes (Col).
24' ST: Marcos Díaz (Col).
29' ST: Matías Caruzzo (Boc).
42' ST: Sebastián Battaglia (Boc).
EXPULSADOS:
29' ST: Juan Luis Quiroga (Col).
ESTADIO: Boca Juniors.
ÁRBITRO: Luís Álvarez.
