martes, 15 de diciembre de 2009

BREVE BALANCE DE 2009

El 2009 fue uno de las temporadas más irregulares del club en los últimos años.
No solo a nivel deportivo, sino también en lo institucional.
Hubo cambio de técnicos, por primera vez se agregó la función de Manager dentro de la institución y, a mitad de año, las clásicas incorporaciones al plantel.
A nivel dirigencial, comparado con lo que estaba acostumbrado a vivir el club, también hubo mucho movimiento. Se habló de ciertas divisiones al igual que entre los jugadores.
Más allá de eso, para Boca fue un año donde no se cosechó ningún logro.
Y no es que esté bien o mal perder pero, al menos, al hincha de Boca le hubiera gustado ser protagonista en los torneos disputados. Y eso no pasó.
En el Torneo Clausura 2009, Boca consiguió de la mano de Ischia apenas 22 puntos conformados por 6 victorias, 4 empates y 9 derrotas. Pero, lo más alarmante fue que conquistó 22 goles y recibió 25. Un presagio de lo que se vendría.
Pero, con la Copa Libertadores de por medio, este Torneo fue pasado a segundo plano, ya que la Copa siempre tiene prioridad.
En la Libertadores había tenido un buen arranque. El grupo lo clasificó primero con 15 puntos de 18 en disputa. Después, ya en octavos de final, quedó sorpresivamente eliminado ante Defensor Sporting de Uruguay.
Con cambio de Técnico (Basile por Ischia) para la segunda etapa del año, más algunas desvinculaciones (Vargas, Palacio y Figueroa), incorporaciones (Medel y Gunino) y tres retornos (Insúa, Marino y Rosada), Boca encaró el segundo semestre a todo o nada. Y, lamentablemente, fue nada.
Por la Copa Sudamericana, el Xeneize quedó eliminado directamente en la primera fase ante Vélez.
Por el Apertura 2009, Boca cosechó nada más que 27 puntos compuestos por 7 victorias, 6 empates y 6 derrotas. Nuevamente, lo más alarmante, fue que convirtió 28 goles y recibió 24.
Nada mejor que estos últimos números para mostrar lo irregular que fue el equipo.
Entre varias cosas que se perdieron, una de ellas fue la chance de participar en la edición 2010 de la Copa Libertadores de América.
Seguramente, de acá al año que comienza en menos de un mes, habrá muchos cambios y nombres nuevos. Lo más importante, sería que se dejen las diferencias de lado a todo nivel (jugadores, cuerpo técnico y comisión directiva) y se empiece a construir hacia adelante una nueva etapa. No importa cuántos logros obtenga pero, al menos, que Boca Juniors vuelva a ser protagonista.
El hincha de Boca está dolido. Pero, lo que más le duele, es la poca respuesta del equipo hacia la gente. La gente, respondió igual. Como quedó demostrado el último domingo ante Banfield donde, la fiesta, parecía ser en la Ribera. Esperemos que el equipo cambie para mejor en el 2010.